Boicot Olimpiadas China

Cuando vemos las imagenes de Tommie Smith y John Carlos en las Olimpiadas reivindicando el Black Power pienso en que en estas Olimpiadas los deportistas tiene la obligación moral de hacer valer su imagen para mostrar al mundo, y más concretamente a China que los derechos humanos deben respetarse en todo el mundo. Claro está que decir esto como simple aficionado para mi es muy fácil, y comprendo hasta cierto modo las presiones políticas e incluso económicas a las que puede estar sometido un deportista que compite en dichas pruebas. Pero siempre cabe la posibilidad de una vez ganada las medalla, en ese momento en que eres el centro de atención del mundo saques un banderín, una camiseta o hagas una mueca clara a favor de los derechos humanos, y por que no, también a favor del Tibet.

Profundizando en el tema de las presiones, no hay mejor elemento de presión para un país que el económico, y aquí entramos en una actitud hipócrita tanto de países como de grandes multinacionales. Si un país bloquea los productos a China y no permite la importación se expone a un aumento de aranceles o incluso a un bloqueo de productos exportables su dicho país, lo mismo ocurre con las grandes empresas ¿ has visto a alguna empresa de esas que salen al fondo del estadio que diga que renuncia?no, esas grandes empresas que luego usan en sus campañas de publicidad la paz, el buen rollo y demás pamplinas ahora es cuando deberían actuar.

Deberíamos dejar actuar libremente a nuestros deportistas, pues conociendo a nuestros dirigentes y a los dirigentes internacionales del deporte es casi seguro que habrán exclamado un: ¡¡¡Ni se os ocurra liar ninguna!!!, ¿y si no fuésemos ninguno a la inaguración de los juegos?. Pues esto es una opción a considerar, pero incluso puede que el gobierno chino plante el chandal del boicoteador y a bulto parezca que no falta nadie.

Yo confió todavía en la raza humana, confió en la gente llana, en los deportistas comprometidos y alejados del dinero, que en las olimpiadas los hay y más de lo que creemos, creo que si dejamos a la gente libertad para expresarse sin miedo, sin temer en rescisiones de contrato, sin pensar en las posibilidades de mercado futuras. Es por tanto que no debemos presionar desde las instituciones a no hacer, a no pensar, sino caeremos en la misma dinámica que China.

Desde aquí animo a todo el mundo al boicot, pero a un boicot contra el pensamiento único, que las olimpiadas sirvan para la mejora de la humanidad y no para cohibir la libertad de expresión.

NOTA: El comercio Chino de tu barrio no tiene la culpa, probablemente piense igual que tu.